Las causas de su muerte no se han dado a conocer.
“Como ciudad, extendemos nuestras condolencias a la familia Rivera por el fallecimiento del ex alcalde de Passaic, Samuel Rivera”, publicó Lora en su página social. “Todavía hoy hablo con personas que comparten historias de cómo los ayudó personalmente y cuánto se preocupaba por las personas”.
El alcalde Lora dijo que “en nuestra comunidad pueden recordar su enfoque para limpiar las calles de crímenes violentos y lo visible que era en Passaic”.
“Nuestras oraciones y pensamientos están con su familia y amigos. Que los recuerdos de las cosas que hizo para ayudar a otros sirvan como un ejemplo durante estos tiempos difíciles”, agregó Héctor Lora.
Samuel Rivera fue sentenciado en agosto del 2008 a casi dos años de prisión y multado con $ 4,000 por aceptar sobornos en efectivo a cambio de influir en los contratos de la ciudad.
Rivera, quien quedó atrapado en un plan de corrupción que contabilizó a 11 funcionarios públicos, renunció en el 2007 después de declararse culpable de intento de extorsión. También sirvió como oficial en el Departamento de Policía de Passaic.
Tras su salida de prisión, se fue a vivir a una ciudad de Pensilvania con su familia.
“Como ciudad, extendemos nuestras condolencias a la familia Rivera por el fallecimiento del ex alcalde de Passaic, Samuel Rivera”, publicó Lora en su página social. “Todavía hoy hablo con personas que comparten historias de cómo los ayudó personalmente y cuánto se preocupaba por las personas”.
El alcalde Lora dijo que “en nuestra comunidad pueden recordar su enfoque para limpiar las calles de crímenes violentos y lo visible que era en Passaic”.
“Nuestras oraciones y pensamientos están con su familia y amigos. Que los recuerdos de las cosas que hizo para ayudar a otros sirvan como un ejemplo durante estos tiempos difíciles”, agregó Héctor Lora.
Samuel Rivera fue sentenciado en agosto del 2008 a casi dos años de prisión y multado con $ 4,000 por aceptar sobornos en efectivo a cambio de influir en los contratos de la ciudad.
Rivera, quien quedó atrapado en un plan de corrupción que contabilizó a 11 funcionarios públicos, renunció en el 2007 después de declararse culpable de intento de extorsión. También sirvió como oficial en el Departamento de Policía de Passaic.
Tras su salida de prisión, se fue a vivir a una ciudad de Pensilvania con su familia.
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