El alcalde Héctor Lora dijo que la medida es necesaria para aliviar las cargas en una ciudad donde los datos del censo muestran que el 80% de los residentes viven en apartamentos y un condado que tenía una tasa de desempleo de alrededor del 10% en diciembre.
"La mayoría de los habitantes de apartamentos de la ciudad se verán afectados positivamente por el congelamiento temporal del alquiler debido a que experimentan una pérdida sustancial de ingresos como resultado de cierres de negocios, reducción de horas o despidos relacionados con COVID 19", dijo Lora.
La suspensión de los aumentos de alquiler dura solo 30 días después de la emergencia de COVID del estado y beneficia a los inquilinos que no están atrasados en los pagos. Los que no se pongan al día pueden estar sujetos a un aumento del 2%.
"El propósito es evitar el abuso del aumento de alquiler en una población vulnerable que ya enfrenta serias dificultades debido a la pandemia", dijo el alcalde.
La inclusión de la asignación de aumento del 2% es para alentar a los inquilinos a no quedarse atrás y reconocer que los propietarios también se ven afectados por COVID.
El alquiler promedio en la ciudad de un apartamento de dos habitaciones es de $ 1,200 a $ 1,700, dependiendo de la ubicación y el tipo de vivienda. El dos por ciento de $ 1,500 es $ 30.
Publicado por: Northjersey.com
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