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Soy un amante apasionado de todo cuanto tiene que ver con el cerebro humano, una maravilla de la evolución o la creación, según el punto de vista de cada quien. Un órgano tan vital como complejo, cuyo peso aproximado es de 1.500 gramos y su tamaño representa el 2% del peso corporal. Consume el 20% todo el oxígeno y la glucosa del organismo.
El cerebro de una persona adulta puede llegar a consumir entre 250 y 300 calorías en un día, lo que equivaldría a una potencia de unos 15 voltios. Este órgano tiene aproximadamente 160.000 km de vasos sanguíneos, lo que equivaldría a más de cuatro vueltas alrededor del planeta Tierra.
Asimismo, alberga alrededor de 100 mil millones de neuronas y cada una de estas puede establecer 200 conexiones por segundos, lo que equivale a 20 trillones de impulsos repletos de información. Las señales que transmite el cerebro al resto del cuerpo viajan a una velocidad de 360 kilómetros por hora.
Científicos del Instituto de Tecnología de Okinawa hicieron esfuerzos por reproducir lo que ocurre en un segundo de vida del cerebro, y para ello fue necesario requerir de 83 mil potentísimos procesadores de cálculo y durante 40 minutos de arduo trabajo, lograron aproximarse a la eficacia de la labor que desarrollan nuestras neuronas en un solo segundo.
Utilizamos el 100% del potencial de nuestro cerebro, inclusive, todas sus zonas siempre permanecen activa, aún si estamos durmiendo. Sin embargo, según establece Estanislao Bachrach, Doctor en Biología Molecular, sólo podemos utilizar el 2% al mismo tiempo.
Las tres cuartas partes del cerebro, es decir, entre un 75% y 85% está compuesto por agua, es por esta razón que cuando nos deshidratamos sentimos dolor de cabeza. En el cerebro existen unos 30 gramos de colesterol, y de hecho, es considerada su “arma secreta para proteger la memoria”.
Para su funcionamiento, el cerebro requiere de un abastecimiento constante de oxígeno y nutrientes, elementos esenciales para la sobrevivencia de este órgano. Sin oxígeno, las células cerebrales mueren y cuando nos saturamos de oxígeno, esto desencadena en problemas mentales, como confusión y pérdida de memoria a largo plazo.
Como se observa, el cerebro es una maravilla, por eso requiere de cuidado y atención constante. Descansar bien, dormir lo suficiente, poner especial atención a la respiración, hacer ejercicios moderados de formas regular, tener una comida balanceada, tomar el agua suficiente, evitar el consumo excesivo de alcohol, no fumar, entre otras actividades, puede resultar muy beneficioso para el cuidado de nuestro órgano madre: El Cerebro.
*Franklin Díaz es coach y conferencista motivacional dominicano.
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