El oficial Lorenzo Bowden, de 39 años, se declaró culpable ante el juez federal de distrito Michael E. Farbiarz en el tribunal de Newark de una información que lo acusaba de conspiración para obstruir la justicia.
“Lorenzo Bowden, un oficial penitenciario, admitió hoy que ayudó a transportar a un detenido a un área donde no había cámaras de video y se quedó quieto mientras otros oficiales golpeaban y agredían repetidamente al detenido esposado que no representaba ninguna amenaza”, dice el Fiscal Federal Philip R. Sellinger.
Según documentos presentados en este caso y declaraciones rendidas ante el tribunal, el 22 de enero de 2021, un detenido en prisión preventiva en la cárcel del condado de Passaic (PCJ) arrojó una mezcla que contenía orina a un oficial correccional. Al día siguiente Bowden admitió que él, junto con el sargento José González y el sargento Donald Viñales, quienes también fueron imputados en este caso, transportaron al detenido por un área de la PCJ que no cuenta con una cámara de videovigilancia, lo que funcionarios penitenciarios y reclusos de La PCJ lo ha denominado un “punto ciego”.
González y Viñales agredieron al detenido, cuando estaba esposado, cuando lo derribaron al suelo y lo golpearon múltiples veces, Bowden admitió más tarde que no intervino para detener la agresión. Un día después de la agresión, el detenido fue trasladado a un hospital local, que documentó heridas causadas por la agresión.
El cargo de conspiración para obstruir la justicia conlleva una pena máxima de 20 años de prisión y una multa de 250.000 dólares. La sentencia de Bowden está programada para el 5 de septiembre de 2024
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