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Pagar los impuestos en cualquier país, más que considerado una ley, debe ser un deber moral.
Las dos cargas impositivas conocidas como: Impuesto Sobre la Renta tiene un cobro del 10 y 37 por ciento, mientras el Impuesto Sobre las Ventas (que en algunos países se conoce como ITEBIS o IVA) y que oscila de un 3 a un 7 por ciento.
En el particular caso del impuesto sobre las ventas, es importante destacar que en muchos estados las personas no pagan este impuesto en su totalidad, lo que significa que tienen una mayor cantidad de compras. También de que, en diversos estados, los alimentos no pagan impuestos cuando se realiza una compra en algún establecimiento comercial.
El dinero recaudado de los impuestos en Estados Unidos es distribuido bajo lo que establece la ley para las áreas de educación, salud, asistencia social y obras de infraestructura.
En la República Dominicana se ha retomado con insistencia el tema de una reforma fiscal, que tiene entre sus prioridades la evasión y revisión del pago de los impuestos, entre ellos, el Impuesto a las Transferencias de Bienes Industrializados y Servicios (ITEBIS) que es de un 18 por ciento, y el Impuesto Sobre la Renta (ISR) de un 15 a 25 por ciento.
El ITEBIS en la nación dominicana, es uno de los más elevados de toda América Latina y el Caribe. De aprobarse una nueva reforma fiscal será reducido a un 16 por ciento, aunque para muchos analistas sigue siendo muy elevado.
Sin embargo, el Impuesto Sobre la Renta se contempla aumentar del 25 a 35 por ciento, de acuerdo con el nivel salarial de los trabajadores.
Además, la reforma fiscal debe incluir eliminar el privilegio que tienen los legisladores (senadores y diputados) de importar vehículos exonerados de impuestos y establecer mayores controles estatales con el dinero público, a fin de evitar la corrupción pública.
Está demostrado que mientras más razonable sea el pago de los impuestos, en esa misma medida, los ciudadanos tendrán una mayor capacidad de adquirir bienes y servicios, lo que contribuye a mantener la estabilidad económica e inversiones en el territorio dominicano.
En la reforma fiscal que hoy se discute en la República Dominicana, también debe tomarse en cuenta la eliminación de pasadas medidas económicas como el pago de impuestos a los intereses que generan las cuentas de los ahorrantes en el pais.
Esto incluye a los cientos de dominicanos del extranjero que mantienen ahorros en los bancos de su territorio, ya que han inyectado en lo que va de año más de cuatro millones de dólares a la economía dominicana. De aprobarse la reforma fiscal, que sea integral y para todos.
*El autor es periodista, educador y escritor dominicano radicado en Nueva Jersey.
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