Arrestan a diez personas en NJ y NY por fraude matrimonial para obtener residencia

NUEVA YORK.- Una investigación del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de Estados Unidos resultó en arrestos por una operación de fraude matrimonial a nivel nacional, dijeron las autoridades.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas, Servicio de Seguridad Diplomática del Departamento de Estado y la Oficina del Fiscal para el Distrito de Maryland dijeron, que cuatro personas fueran acusadas de facilitar el fraude de visas y matrimonios.
A través del trabajo de investigación persistente y coordinado, el Departamento de Investigaciones de Seguridad Nacional de ICE y USCIS identificaron casos en que esas personas se buscaron beneficios de inmigración a través de matrimonios fraudulentos. Arrestaron administrativamente a 10 personas el jueves pasado.
Desde abril de 2022, las autoridades comenzaron a investigar a personas sospechosas de celebrar matrimonios falsos con ciudadanos extranjeros para obtener beneficios de inmigración, expresan.
“Después de investigar y entrevistar peticionarios y beneficiarios, USCIS determinó que los casamientos fueron organizados por Ella Zuran, Tatiana Sigal y Alexandra Tkach, todas residentes de la Ciudad de Nueva York. A ellas se les pagaron miles de dólares para organizar y coordinar bodas fraudulentas, lo que incluyó la preparación de formularios de inmigración fraudulentos y certificaciones médicas de salud falsas, además de solicitudes para beneficios de inmigración”, dicen en un comunicado.
Agregan que Shawnta Hopper, de Sicklerville, Nueva Jersey, también fue incluida en la acusación de un gran jurado federal. Hopper animó a varios ciudadanos estadounidenses a participar en los casamientos fraudulentos con extranjeros por beneficios financieros.
“Algunos casamientos son realizados en la nube. Algunos son fraudulentos”, dijo el portavoz de USCIS, Matthew Tragesser. “Nuestra colaboración con ICE acabó con un grupo de fraude matrimonial donde a ciudadanos estadounidenses se les pagó para casarse con extranjeros”.
El funcionario indicó que “los defraudadores están saliendo esposados. Comprar un cónyuge no le convierte en ciudadano estadounidense”.
Las personas involucradas tuvieron sus beneficios de inmigración revocados como parte de esta investigación.